Te vi de pie, desnuda y orgullosa,
y bebiendo en tus labios el aliento,
quise turbar con infantil intento
tu inexorable majestad de diosa.
Me prosternó a tus plantas el desvío
y entre tus muslos de marmórea piedra,
entretejí con besos una hiedra
que fue subiendo al capitel sombrío.
Suspiró tu mutismo brevemente
cuando la sed del vértigo ascendente
precipitó el final de mi delirio;
Y del placer al huracán temiendo,
se doblegó tu cuerpo como un lirio
y sucumbió tu majestad, gimiendo.
Rubén Martínez Villena
Circa, 1921
Nota: Este soneto, segun se cuenta, fue el resultado de una disputa con un poeta amigo, quien al parecer alegaba que toda poesía erotica rayaba con la pornografía.
5 comments:
Mira tú, en tan temprana época como 1921 ya se practicaba el submarinismo en la Antilla.
Se habrá vuelto tísico el subversivo poeta por la humedad de las diosas majestuosas?
Por el contrario mi estimado Guicho. Bueno, en todo caso al menos yo siempre he creído que esa savia tiene propiedades curativas!
Acaso si el poeta se hubiese dedicado más a libar de aquellas mieles en lugar de poner su confianza en médicos rusos quizás le hubiese podido jugar una mala pasada a la parca. :-)
Saludos!
JC
muy bella la foto y la poesia,,,saludos
Muchas gracias Gaviota!
siempre me dijeron que Ruben hacia buenisimos poemas, pero no habia leido ninguno que recuerde. que verguenzaaaaaaa.
precioso.
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